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Cualquier ciudadano – justiciable puede verse detenido y por ende privado de libertad en ciertas ocasiones. En el día de hoy desde Lealta Abogados queremos arrojar luz sobre cuáles son los movimientos vitales que deben hacer los familiares de aquellas personas que se ven privadas de libertad en algún momento sea por la circunstancia que sea.

Las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, ya sean Mossos d’Esquadra, Guardia Civil, Policía Nacional, entre otros, tras proceder con la detención siguen los siguientes pasos;

En primer lugar informan a la persona detenida en un lenguaje que sea fácilmente comprensible del motivo de la detención. Si nos encontramos ante un ciudadano extranjero que no entiende los idiomas oficiales del Estado se le asigna un intérprete a tal efecto.

Posteriormente proceden a leer los derechos que asisten a la persona detenida, recogidos en el artículo 520 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal. Uno de ellos y de los más importantes es no confesarse culpable y elegir un abogado de su confianza. A lo que los agentes suelen añadir la coletilla de “y si no conoces ninguno, se te asignará uno de oficio”.

Ahí es donde entra la importancia de un buen abogado penalista; entrar a conocer del asunto desde el mismo momento de la detención. Lealta Abogados cuenta con el servicio de asistencia en comisaría las 24 horas del día los 365 días del año para poder defender los intereses de nuestros clientes al verse privados de libertad.

En tercer lugar la persona es conducida a dependencias policiales donde se le tomarán las huellas y/o se realizaran otras diligencias de identificación, los agentes actuantes empezarán a generar el atestado policial que, después de la declaración del detenido (siempre en presencia de un abogado) se remitirá al Juzgado.

Cuando se persona uno de nuestros abogados en Comisaría lo primero que hacemos es una entrevista de carácter reservado con el detenido; ello nos permite cerciorarnos que han sido respetados los derechos del detenido además de conocer la versión del cliente para trazar una línea de defensa inicial y concluir si es más favorable declarar en sede policial o no hacerlo. No hay una regla general para tomar tal decisión, puesto que siempre deben ser tenidas en cuenta las especialidades de cada caso en particular y solo un abogado especialista y dedicado podrá tomar la decisión adecuada.

En pluralidad de ocasiones y cuando ya hay abierta causa judicial, se recomienda no declarar y esperar a tener acceso a lo practicado en sede judicial, en cambio en otras es imprescindible ofrecer la versión propia de los hechos para evitar la apertura de un procedimiento judicial.

De lo hasta aquí comentado surgen muchas preguntas; siendo las más frecuentes las siguientes.

¿Podéis conseguir la libertad de mi familiar / la persona detenida en el mismo día?

Como norma general la persona detenida pasa a disposición judicial al día siguiente lo que conlleva la pernocta en los calabozos de comisaría (no podemos olvidar que la norma indica que la detención debe durar lo mínimo posible). En ocasiones extraordinarias el abogado penalista según las circunstancias del caso puede conseguir dejar sin efecto la detención y lograr de esta forma la libertad inmediata del cliente.

Al día siguiente -o en un plazo máximo de 72 horas- pasa a ser conducido ante la autoridad judicial.
El juez examinará el atestado policial y tras las primeras diligencias de investigación como declaraciones del detenido y denunciante, por ejemplo, podrá ser celebrada la comparecencia del artículo 505 y/o 544 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal.

En dichas comparecencias se puede decidir sobre;
1- La procedencia de imponer al detenido algún tipo de medida cautelar (comparecencia apud acta, orden de alejamiento, prohibición de comunicación, prohibición de salida del territorio español, retirada del pasaporte…).
2- La situación personal del detenido; esto significa si queda en libertad a la espera de juicio o bien si pasa a prisión provisional.

Dedicaremos más adelante otro artículo profundizando en las dos comparecencias, ya que también es de vital importancia el rigor técnico del abogado que le va a asistir. Un buen abogado hablará también con la familia o amigos para conseguir documentación favorecedora para defender la situación personal del detenido.

Lealta Abogados penalistas actúa en todo el territorio español para defender a personas detenidas y estamos a disposición del cliente las 24 horas del día los 365 días del año, servicio exclusivo para las asistencias a detenidos.